Microfeminismos

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Existen parejas y existen objetos. Pero ¿Parejas objetos? Lamentablemente si, existen también. 

Conocí a Sara hace mucho, tenía un novio celoso, posesivo, egoísta... Le duró poco pues lo dejó debido a la actitud del chico. Algo que su entorno ya esperaba. Una noche estaba de fiesta con sus amigas y conoció a otro chico, Sergio. 

Sergio era todo lo contrario a la primera pareja de Sara, así que empezaron su relación. Poco a poco el chico empezó a conocer amistades y familia de Sara. Sergio encantaba a todo el entorno de la chica por su simpatía y amabilidad. 

Se dice que no todo es bonito y es cierto. Empezaron los problemas cuando la familia de Sara empezó a despuntar por su tiranía. "Sergio llevame de compras" "Sergio, este fin de semana pintamos el barco". 

Sara no se percataba que Sergio ya no quedaba con ella con la misma alegría y mucho menos cuando tenía que ir a ver a la familia de la chica. Por si fuese poco, acompañaba a Sara a clase cada mañana aunque Sergio trabajase de noche y estuviese cansado para seguir conduciendo. 

Las amigas de Sara tampoco aportaban nada positivo. Una tarde, no era la primera, le enviaron un mensaje a Sara asegurándole que Sergio estaba besando a una chica en el centro de la ciudad. Sara no pensaba quedar con el chico aquella tarde, pues él tenía asuntos que atender pero a ultima hora los había cancelado y mientras sus amigas decían que lo estaban viendo, Sergio estaba sentado al lado de Sara. 

• Tratar a la pareja con menosprecio y lo peor, permitir que otros lo traten así. 
• Demostrar celos porque tiene amigas o compañeras de trabajo. 
• No consentir que la pareja haga nada fuera de la relación, aunque sea ir al gimnasio o asistir a una cena con amigos. 
• Intentar de convertirle en algo así como un mayordomo o un empleado. 
• Posesión, faltas de respeto, egoísmos...

Si quiero, si amo y si respeto a mi pareja prefiero verle libre que con grilletes a mi lado. Si es libre y vuelve, sin duda hay un motivo. Si es un preso y vuelve es por obligación. Ser pareja si, pero cada uno tiene su vida con momentos que se cruzan. Que tenga y cumpla sus propios deseos u objetivos y así nadie se echará nada en cara. La base de cualquier relación, aunque sea de amistad, es el respeto. Sin ello el castillo está construido sobre nubes.